Este ha sido un año para olvidar dentro del sector MICE. Los Meetings, Incentives, Conferences and Events han quedado apartados de las agendas de todas las empresas. Su primer revés se lo llevó con la cancelación del Mobile World Congress de Barcelona y a raíz de ahí, las anulaciones se sucedieron en cascada. Las normas de distanciamiento social y el confinamiento obligaron a los profesionales y organizadores de eventos a adoptar, de forma apresurada, las plataformas virtuales de reuniones que estaban disponibles en el mercado, aún cuando no eran herramientas exclusivas para la realización de eventos corporativos.

Un segmento basado 100% lo presencial  

Para un sector como el MICE, tradicionalmente poco digitalizado y en el que cobra gran importancia la asistencia presencial, el networking y la experimentación de productos, este cambio supuso un desajuste no solo en el core business de muchas empresas sino también en sus plantillas de meeting planners.
Los equipos de planificadores de eventos que miraban con recelo las plataformas de eventos virtuales se vieron abocados al uso de estas herramientas tecnológicas de la noche al día. Muchos escépticos pensaban que ofrecer un evento virtual con la misma calidad y el mismo nivel de engagement que uno presencial era imposible. Sin embargo, estos meses se han convertido en un laboratorio de aprendizaje para mejorar los eventos tradicionales.

Se aproxima una época de innovación y creatividad en el sector

Estamos a punto de presenciar un cambio en el modelo de negocio de los eventos que se irá intensificando durante los próximos meses. Anteriormente, se venía observando una clara tendencia hacia la celebración de eventos con un trabajado mensaje de comunicación y en el que se incorporaban pequeñas dosis de creatividad digital. Ahora, en la era post-covid, aquellos organizadores de eventos que acompañen su estrategia de marketing con un potente mensaje y además, incorporen la digitalización serán los vencedores. Porque el contenido y cómo mandamos ese mensaje a través de los distintos canales digitales es lo que la crisis del COVID ha enfatizado aún más. 

Estos son los 3 principios que marcarán tendencia en la renovada industria MICE:  

1. Creatividad en eventos digitales
Ya sea una reunión telemática de formación, un webinar, un congreso o una Junta de Accionistas, la diferenciación se obtiene con altas dosis de creatividad. Los asistentes, como si de un videojuego se tratase, entrararán a formar parte de un espacio único, creado especialmente ad-hoc, en el que se formarán y harán networking a través de su Avatar.

2. El realismo en su máxima esencia 
El realismo de los eventos digitales, a través del diseño gráfico, personalización del entorno virtual, creación de imágenes y logotipos relacionados con la empresa ya es una realidad, pero aún falta profesionalizarlo. Habrá que añadir platós virtuales, efectos de película cinematográfica y el apoyo del evento con un buen presentador para garantizar el factor sorpresa entre los asistentes.

3. Micro-eventos digitales con macro-resultados
Un grupo reducido de personas que han sido invitados de forma estratégica, ofrece resultados altamente efectivos. En la época post-covid este tipo de eventos se convertirán en los claros triunfadores ya que serán la opción más factible para mantener el contacto presencial tras las reuniones digitales. Este tipo de micro-eventos serán presenciales y ofrecerán la posibilidad de clarificar dudas previas a la reunión virtual. 

Un nuevo rumbo para el futuro

El camino para los profesionales de eventos que trabajan en distintas disciplinas como organizadores, productores, marketing, audiovisuales, sonido, espacios para eventos, caterings, azafatas, profesionales freelance es incierto. Es posible que los eventos tal y como los conocemos no vuelvan a realizarse en un cierto tiempo y esto, aunque provoca temor, también supone una oportunidad jamás vista para cautivar a nuestra audiencia. Los profesionales de los eventos, conocedores de su industria como nadie, deben aprender a moverse entre lo presencial y lo digital y, además de planificar, ofrecer espectáculo para emocionar a la audiencia. Ha llegado el momento de Rethinking Events, es la hora de sacar nuestro lado más creativo.