‘S.O.S’ ESTAMOS EN ALERTA ROJA

Ayer 17S España se tiñó de rojo. Y el movimiento “Alerta Roja” supo recordar porqué la creatividad, el mundo del espectáculo y los eventos de empresa van de la mano.

28 ciudades españolas se unieron, de forma simultánea, para reivindicar que la industria de los eventos y el espectáculo son cultura, formación y conocimiento.

400 flight cases, cajas enormes negras y resistentes, utilizadas para mover micrófonos, cables y altavoces, representaban a un sector que está paralizado desde el mes de marzo y para el cual no hay planes de reactivación.

El día 17 de septiembre de 2020 quedará grabado como un hecho histórico. Una fecha en la que por primera vez todo un sector, heterogéneo y fragmentado, salió a la calle para reivindicar que detrás de cada evento, encuentro profesional o concierto hay multitud de profesionales que velan para que todo salga perfecto.

Miles de profesionales se han quedado sin trabajo desde el mes de marzo o en el mejor de los casos siguen en situación de ERTE. La industria de los eventos y del espectáculo fue la primera en verse paralizada por el Covid y la última que se va a recuperar. Sin embargo, esto no parece que preocupe mucho al gobierno ya que no hay ningún plan de contingencia para afrontar la situación y/o medidas previstas para ayudar a un sector que se encuentra al borde del colapso.

Los eventos y el espectáculo son manifestaciones artísticas de las que a todos nos gusta disfrutar. Su capacidad de sorpresa, la posibilidad que ofrecen de transmitir mensajes y su fuerza creativa captan la atención del público y nos hacen vibrar. ¿A quién no le gusta presenciar un espectáculo único e innovador?

La industria de los eventos es pura magia porque en ella trabajan profesionales de distintas disciplinas que sacan lo mejor de sí mismos (agencias de organización de eventos, audiovisuales, decoradores, caterings, imprentas, ingenieros, azafatas, profesionales freelance, marketing, empresas de transporte…) Un sinfín de profesionales de distintas especialidades participan del proceso creativo del evento convirtiéndolo en algo único, tanto en contenido como en escenografía. Una experiencia completa que para el espectador acaba con un recuerdo memorable.

Ayer 17S marcó un hito, un momento decisivo en el que se va a decidir el futuro de la industria y el de la sociedad. La pregunta es sencilla: ¿Queremos seguir disfrutando de los eventos en España? Está claro que la capacidad de supervivencia va cayendo cada día que pasa. Ha llegado el momento de reflexionar y decidir si queremos seguir apostando por un sector estratégico. Eso si, quizás para cuando se decidan a reactivarlo ya será demasiado tarde.